¿Puedo practicar ciclismo si tengo asma? ¿Qué deporte me conviene más? Buscamos respuestas en el servicio de Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, dirigido por el doctor José María Echave-Sustaeta.
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¿Puedo practicar ciclismo si tengo asma?
El ejercicio físico debe formar parte del estilo de vida de cualquier persona con asma bronquial, ya que aporta importantes beneficios para la salud.
La única situación en la que un asmático debe limitar el ejercicio físico es si está sufriendo una crisis o pasa por una época de mal control.
Si tienes dudas, puedes preguntar a tu médico, que te aconsejará el tipo de ejercicio más adecuado, las mejores condiciones en las que debe realizarse y si necesita una medicación preventiva antes de hacerlo.
Asma y deporte, excelente combinación
La práctica de ejercicio físico aeróbico habitual es uno de los sistemas no farmacológicos para mejorar el control del asma y reducir el riesgo de crisis.
Asma y deporte son, en realidad, una excelente combinación. Y esto, frente a la creencia popular que decía que había que limitar la practica de deporte en los asmáticos.
Incluso los niños con asma que hacen ejercicio físico en la infancia y adolescencia alcanzan mayores niveles de capacidad pulmonar que los que no lo hacen.
Asma de esfuerzo o inducido por esfuerzo y ejercicio
Hay un grupo de pacientes con asma bronquial, que tienen una forma especial de asma. Se llama asma de esfuerzo o de ejercicio o asma inducido por esfuerzo y ejercicio.
Éste puede ser una manifestación más en personas que tienen asma bronquial con otros síntomas. Pero hay personas que sólo padecen asma de esfuerzo y no tienen asma fuera de esa situación.
En el asma de esfuerzo, los síntomas no suelen aparecen durante el mismo (eso suele ser más indicativo de asma mal controlado), sino que aparecen entre los 5 y 15 minutos después de terminar el ejercicio, y desaparecen por sí solos pasados unos 20 minutos.
Se puede prevenir mediante el calentamiento previo, realizar ejercicio con momentos de descanso, y administrando un medicamento preventivo antes del mismo, el más habitual es un broncodilatador de acción rápida.
Bicicleta, natación, running
Incluimos a continuación una serie de recomendaciones para personas asmáticas que quieren practicar algún deporte:
- Ten un buen control del asma. No debes salir a correr si está mal controlado o estás en mitad de una crisis.
- Adapta el tipo de deporte en función de la temporada: si eres alérgico al polen, no es recomendable que practiques deporte al aire libre en primavera en momentos del día de máxima polinización.
- Los más beneficiosos son los deportes aeróbicos: natación, correr y bicicleta. La natación puede ser un deporte especialmente beneficioso. Habitualmente se realiza en condiciones cálidas y húmedas, y es menos probable que se asocie al asma de esfuerzo (que es más frecuente en ambientes cálidos y secos). Hay un grupo de personas que al nadar en piscinas de interior y exponerse a ambientes con mucha concentración de cloro pueden experimentar síntomas irritativos como tos, e incluso empeoramiento del asma. Suele ser muy fácil de identificar porque los síntomas se producen a las pocas horas de la exposición.
¡No hay excusas para evitar hacer deporte!
- Es muy importante realizar un buen calentamiento antes de iniciar el ejercicio, iniciándolo de manera suave y progresiva hasta alcanzar la intensidad perseguida. Ha demostrado que previene el asma desencadenada por el ejercicio.
- Siempre debes tener disponible la medicación de rescate, y utilizarla antes del ejercicio si tienes asma de esfuerzo y/o se lo han aconsejado tus médicos.
- Si son deportes aeróbicos en exterior en ambientes fríos, cubre la boca con una bufanda/braga, para evitar que el aire frío entre directamente en la vía aérea.
- Idealmente debes intentar hacer respiración nasal, la nariz permite calentar, humidificar y filtrar el aire. Es verdad que la intensidad del ejercicio puede llevarte a hacer respiración bucal en un intento de reducir el esfuerzo respiratorio.
Una vez dicho esto, no olvides buscar consejo profesional. ¡Y recuerda que no hay excusas para evitar hacer deporte!